El candidato del PP a la Alcaldía de Barcelona, Alberto Fernández Díaz promete reducir la plantilla pública en un 30% si gana las elecciones municipales del 22 de mayo.
En un coloquio en Pimec, ha apostado por ceder al sector privado servicios que actualmente gestiona el consistorio, lamentando que no tiene sentido que éste sea propietario de aparcamientos, gestione el parque de atracciones del Tibidabo y sea copropietario de hoteles de lujo.
Ha asegurado que su prioridad es crear empleo, por lo que el consistorio debe simplificar la burocracia y sustituir la actual autorización previa que debe expender para que se abra un negocio por una simple notificación del emprendedor y un control posterior.
Fernández Díaz ha apostado por proteger el comercio de proximidad, y ha criticado que las inspecciones a menudo se realizan con el objetivo de sancionar mientras se hace 'la vista gorda' con los comercios regentados por inmigrantes para que no se tache a la administración de xenófoba y racista.
Ha lamentado que se haya 'despenalizado' a los vendedores ilegales y los 'top manta', y ha advertido de que esta actividad podría dispararse y concentrarse en zonas de la ciudad.
En cuanto a movilidad, ha apostado por la moto eléctrica, por que se consoliden cuatro rondas en Barcelona y por que se excave un túnel que atraviese el Tibidabo, y ha destacado la importancia del transporte público, rechazando cualquier retraso en la construcción del Metro.
Además, ha sentenciado que 'Barcelona debe vacunarse contra la bicifobia', asegurando que no se puede llenar la ciudad de bicicletas y que se debe intervenir en la Diagonal para cambiar los árboles en mal estado y evitar que se convierta en un velódromo.
Por otro lado, el alcaldable ha lamentado que los distritos apliquen las ordenanzas municipales de distinto modo, y a defendido una Barcelona descentralizada pero con una unidad de criterio al interpretar la normativa
En un coloquio en Pimec, ha apostado por ceder al sector privado servicios que actualmente gestiona el consistorio, lamentando que no tiene sentido que éste sea propietario de aparcamientos, gestione el parque de atracciones del Tibidabo y sea copropietario de hoteles de lujo.
Ha asegurado que su prioridad es crear empleo, por lo que el consistorio debe simplificar la burocracia y sustituir la actual autorización previa que debe expender para que se abra un negocio por una simple notificación del emprendedor y un control posterior.
Fernández Díaz ha apostado por proteger el comercio de proximidad, y ha criticado que las inspecciones a menudo se realizan con el objetivo de sancionar mientras se hace 'la vista gorda' con los comercios regentados por inmigrantes para que no se tache a la administración de xenófoba y racista.
Ha lamentado que se haya 'despenalizado' a los vendedores ilegales y los 'top manta', y ha advertido de que esta actividad podría dispararse y concentrarse en zonas de la ciudad.
En cuanto a movilidad, ha apostado por la moto eléctrica, por que se consoliden cuatro rondas en Barcelona y por que se excave un túnel que atraviese el Tibidabo, y ha destacado la importancia del transporte público, rechazando cualquier retraso en la construcción del Metro.
Además, ha sentenciado que 'Barcelona debe vacunarse contra la bicifobia', asegurando que no se puede llenar la ciudad de bicicletas y que se debe intervenir en la Diagonal para cambiar los árboles en mal estado y evitar que se convierta en un velódromo.
Por otro lado, el alcaldable ha lamentado que los distritos apliquen las ordenanzas municipales de distinto modo, y a defendido una Barcelona descentralizada pero con una unidad de criterio al interpretar la normativa
Menuda propaganda hace el PP.Inaudito¡
ResponderEliminarEste es el partido que va a solucionar los problemas de España....¡Estamos apañados!
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